UN ÁNGEL PARA CADA MES DEL AÑO
Entre la gran de infinidad de Ángeles que nos acompañan, Existen doce tipos de Ángeles que nos acompañarán a lo largo de los doce meses.
Estos Ángeles harán que se vayan desarrollando en nosotros ciertas virtudes acorde con las estaciones del año.
Ya sabéis que hay un Ángel para cada mes del año y nos fueron dados para nuestro desarrollo personal. Cada partícula y cada hecho en la tierra tiene un significado divino.
ENERO:
El Ángel de enero nos enseña a auto examinarnos.
El Ángel de enero nos da compañía mientras meditamos sobre esas largas y frías noches de invierno, ayudándonos a ser honestos con nosotros mismos y pacientes al mismo tiempo.
El nos lleva hasta lo más profundo de nuestro ser, para hacer balance de todos nuestros conocimientos adquiridos y la evolución de nosotros mismos.
Este Ángel se manifiesta con la forma de un anciano en nuestro interior, el Ángel de Enero toma nuestras manos mientras buscamos entendimiento de nuestras lecciones del año anterior.
Nos ayuda a comprender los errores cometidos y ayuda a perdonarnos a nosotros mismos.
Es normal que al comienzo del año sintamos que nuestro organismo es más vulnerable, es común tener constipados, bajón de energías, dolor en las articulaciones, deseos de llorar, emociones que afloran fácilmente, pereza para caminar o hacer ejercicio y nuestras defensas bajen al mismo suelo, pero no hay que alarmarse ya que todo ello es producto del Ángel anciano y sabio que nos acompañará durante este mes de Enero; por eso nuestro organismo reacciona y se comporta con los achaques típicos que manifiestan los ancianos.
Las personas cuanto más sensibles a las energías sean pues más lo notarán, y también mejor pueden notar su presencia en nuestro interior.
El Ángel anciano nos indica que es la hora de oír tu cuerpo.
Con esta ayuda podemos comenzar a planificar un nuevo futuro en nuestras vidas.
FEBRERO:
El Ángel de Febrero es el ángel de paciencia.
El Ángel de Febrero nos trae el poder desarrollar la paciencia, esperar pacientemente aquello que hemos preparado o proyectado para el futuro cercano.
Durante las oscuras, tormentosas noches de Febrero, cuando la naturaleza está en un estado de congelación y adormecimiento, el Ángel del mes de Febrero puede ayudarnos a aprender a esperar con gracia los primeros indicios de primavera.
El Ángel de Febrero nos enseña que el invierno tiene su propia paz especial, que es momento para el recogimiento y la autoexploración de nuestros actos.
En Febrero, nosotros podemos completar proyectos sin terminar y prepararnos para comenzar nuevos en la primavera.
El Ángel de Febrero nos trae el regalo de la paciencia, ayudándonos a disfrutar la soledad y el silencio del invierno, guiándonos a completar nuestra energía para los días calientes y ocupados por venir.
El Ángel de Febrero nos indica a descansar y esperar pacientemente.
MARZO:
El Ángel de Marzo nos enseña a tener coraje.
El Ángel de Marzo nos anima a través de los momentos helados de la vida, empujando nuestra moral y ayudándonos a lograr metas nuevas.
Con la ayuda del Ángel, nosotros derrotamos cualquier barrera, ya sea de creencia personal o falta de confianza en la religión que nos llame, traspasar las barreras que nos detienen.
Es el momento de comenzar aquel sueño de toda nuestra vida o comenzar un proyecto que hemos visualizado pero nunca comenzado.
Según el sol comienza a calentar nuestro espíritu, el ángel de Marzo se regocija con nosotros al primer signo de primavera, y nos presta su coraje para prepararnos para una nueva y satisfactoria tarea.
El Ángel de Marzo nos indica que es buen momento para sembrar la semilla de los proyectos.
ABRIL:
El Ángel de Abril nos enseña el espíritu del renacimiento y la nueva vida.
Los días crecen más largos y el sol nos comienza a calentar, Abril es tiempo para una nueva vida y nuevos comienzos.
El Ángel de Abril nos empuja a examinarnos a nosotros mismos en nuevas direcciones y a hacernos vulnerables al frente de personas, situaciones y lugares poco familiares.
Este Ángel joven y jovial que vivirá a nuestro lado durante este mes, nos enseña la importancia de reírnos, de salir y divertirse, y es en este mes cuando nuestra sangre comienza a cambiar como a de cualquier joven que se va haciendo adulto con el paso del tiempo.
Mes propicio para hacer esfuerzos nuevos que enriquezcan nuestra vida, y nos traigan un nuevo significado a nuestra carrera o vida familiar.
El Ángel de Abril nos lleva hasta las entrañas de la madre tierra para después llevarnos al mismo cielo.
Este Ángel nos enseña a disfrutar todos los signos de despertar, tanto en la naturaleza como dentro de nosotros mismos.
El Ángel de Abril nos indica que seamos felices porque la semilla dará su fruto.
MAYO:
El Ángel de Mayo nos enseña a utilizar las emociones nuevas y renovadas.
El Ángel de Mayo se regocija con nosotros cuando nos emocionamos al ver los árboles y arbustos florecer y saboreamos en anticipación los frutos venideros.
Este Ángel de primavera, nos recuerda que es tiempo de ver los pequeños brotes de nuestras semilla dentro de nosotros mismos.
Por ejemplo quizás tenemos muy dentro un deseo, un talento artístico nunca explorado o una amistad que no hemos podido conseguir.
El Ángel de Mayo nos ayudará a descubrir este potencial, alimentando nuestro espíritu para que nos atrevamos a llevar a cabo esa promesa escondida y cultivar los frutos de una vida plenamente vivida.
Nuestro cuerpo en este mes intentará despedir aquello que no deseamos, dejar vacía nuestra mente de estorbos y prejuicios que no nos conducen a ninguna parte.
Por eso es frecuente las alergias y estornudos, dolor de garganta por lo que callamos y guardamos.
El Ángel de Mayo nos indica que es el momento de limpiar aquello que nos estorba.
JUNIO:
El Ángel de Junio nos ayuda a florecer y crecer fuertes.
El Ángel de Junio nos enseña a mantener nuestro entusiasmo por los proyectos y direcciones nuevas que comenzamos en la primavera.
En este tiempo glorioso de sol y crecimiento, aprendemos a buscar la tibieza de amistades y familia, para ayudarnos a alimentar las semillas que plantamos y convertirnos en todo lo que se supone que deseamos.
El Ángel de Junio nos impulsa a estar firmes en nuestras intenciones, a renovar nuestra dedicación y mantenernos en el camino destinado para nosotros.
Nos enseña a ser fuertes en nuestras creencias y nos apoya para dirigirnos en la dirección correcta.
El Ángel de Junio nos indica que debemos ser fuertes en los procesos karmicos
JULIO:
El Ángel de Julio trae una temporada de relajamiento, un tiempo para jugar y volver a llenarnos de energía.
Los proyectos que comenzamos en la primavera deben estar bien maduros y creciendo fuertemente por sí mismos.
El Ángel de Julio nos impulsa a coger tiempo, ahora, para observar lo que hemos plantado.
El Ángel de Julio nos anima a cuidar el jardín de nuestra vida, cuidar lo que hemos comenzado, y a ser suficientemente objetivos para quitar las malas hierbas y los elementos poco productivos o dañinos.
Este Ángel de verano nos recuerda que alimentamos las personas y cosas que nos traen felicidad, para que podamos recoger una cosecha de alegría y cumplimiento.
Durante este mes nuestro cuerpo siente necesidad de beber en abundancia, esto nos recuerda que la semilla está bastante fuerte y necesita nutrirse para ser cosechada en plena madurez.
El Ángel de Julio nos indica que todo va por el buen camino.
AGOSTO:
El Ángel de agosto es el ángel de perseverancia.
Las nuevas direcciones que comenzamos en la primavera se hacen cada día más fuerte el fruto y esperamos pacientes el momento de ser recolectado.
Este Ángel nos advierte que como es el jardín, así es nuestro interior.
Como un jardín que necesita constante agua y quitar las plagas, nuestros proyectos y sueños requieren una determinación para traerlos a su florecimiento, para posteriormente ser recolectados en plena madurez.
El Ángel de Agosto nos ayuda con energía desconocida a atender el jardín que hemos plantado.
El Ángel de Agosto nos indica que no podemos dejar brotar la mala hierba en nuestro jardín.
SEPTIEMBRE:
El Ángel de Septiembre nos ayuda a prepararnos para la cosecha a mano.
Según el verano llega a cierre, el Ángel de Septiembre nos recuerda que hacer una pausa y reunir energía nueva porque la culminación de un proyecto usualmente demanda una oleada de energía.
El Ángel de Septiembre nos trae esta oleada asegurándose que completamos nuestra tarea.
Este Ángel de verano tardío también nos ayuda a organizar las frutas de nuestra labor , y compartir lo que hemos creado en nuestras vidas.
En Septiembre, nosotros nos deleitamos en nuestra buena fortuna, ya sea en el jardín, relaciones o carrera, y compartimos nuestro gozo con todos aquellos cuyo apoyo ha hecho nuestra cosecha posible.
El Ángel de Septiembre nos indica que nuestra cosecha debemos recogerla a mano.
OCTUBRE:
El Ángel de Octubre es el Ángel kármico por excelencia.
Octubre es un buen tiempo para descansar de nuestros proyectos y sueños y analizar lo que actualmente hemos realizado.
El Ángel de octubre nos ayuda a ser honestos y objetivos acerca de lo que es bueno y lo que no lo es.
Con esta ayuda podemos claramente enfrentar las consecuencias de nuestra elección la pasada temporada.
Vamos a saborear nuestra cosecha y rechazar lo que este agrio o inmaduro; vamos a anotar lo que funcionó y lo que no, y vamos a cambiar positivamente.
Este Ángel nos ayuda a hacer balance de nuestra cosecha con respecto a las semillas que plantamos, es el momento de ver que lo que se siembra se recoge.
Dependiendo del abono, el amor y el lugar donde sembramos nuestra semilla, la poda de malas hierbas y el cuidado en general de nuestra semilla, pues así será el resultado del fruto obtenido.
El Ángel de Octubre nos enseña que la mejor fruta de nuestra cosecha personal es el entendernos personalmente.
NOVIEMBRE:
El Ángel de Noviembre es el ángel de humildad.
El Ángel de Noviembre nos impulsa a reconocer y apreciar el rol de apoyo que otros han jugado en nuestras vidas este año, y hasta a agradecer y dar gracias a aquellos que nos han enseñado lecciones difíciles.
Este Ángel de Noviembre nos guía a dar gracias de una manera nueva perdonando mejor heridas y remediando amistades frustradas.
Es por eso que nos ayudamos unos a otros a ser realmente agradecidos por nuestras relaciones y las riquezas que traen a nuestra vida.
El Ángel de Noviembre nos indica que ser humildes es reconocer tus errores, y nos enseña a pedir perdón.
DICIEMBRE:
El Ángel de Diciembre es el Ángel de la generosidad.
El Ángel de Diciembre celebra con nosotros este tiempo de dar regalos a todas las criaturas salvajes, y a todos los hijos de Dios.
El Ángel de Diciembre nos guía a unir nuestras manos con personas de todas las razas y religiones, reconociendo en todos una única semilla de luz, independientemente de su color.
Compartimos la responsabilidad de repartir alegría y salud en la tierra.
También hace que nuestra sensibilidad se ponga a flor de piel para poder apreciar los misterios de la vida, y por consiguiente los misterios de Dios.
El Ángel de Diciembre nos enseña de la importancia de cuidar a nuestro niño interior.
Espero que os guste.
. Enero de 2016.
QUE MARAVILLOSO, GRACIAS POR ESTAS NUEVAS, GRACIAS, AMEN.
BENDICIONES DIGEON.